Hay que reconocer que la educación como núcleo del
saber pedagógico, permite ampliar las competencias y potencializar habilidades,
no sólo para el comportamiento social, sino para la adaptación del hombre en la
sociedad de manera productiva. Por ello,
es importante abrir espacios para la búsqueda de información que nos permita
ampliar el horizonte del conocimiento para procesar, comprender y aprovechar el
valor agregado que puede generar esta materia prima en la realización de
nuestras vidas con éxito.
La educación desde una concepción integral, debe ser
comprendida como un proceso de formación permanente a lo largo de toda la vida
del individuo en su práctica social, esta premisa requiere pensar que la
educación como proceso de formación es continuo, constante desde que se nace
hasta que se muere; al representar en el ser humano una construcción de sus
conocimientos, aptitudes, de su facultad de juicio y de su actuar, permite
tomar conciencia de sí mismo y de su entorno para desempeñar una función social
protagónico.
Esperamos que la información suministrada te sirva
de recurso en tu formación académica y profesional.
“Comienza haciendo
lo que es necesario, después lo que es posible y de repente estarás haciendo lo
imposible”.
San Francisco de Asís